
Este año ha sido una sacudida para la humanidad, se ha tenido que enfrentar una pandemia que tomó a todos por sorpresa. El miedo, la incertidumbre y la ansiedad cobraron fuerza en muchas personas, y aunque estas emociones son totalmente normales, las circunstancias las han llevado a un límite, afectando la calidad de vida y la salud.
El yoga, como disciplina, ha sido siempre reconocido por los beneficios y el bienestar que trae a sus practicantes: salud física integral, paz mental, felicidad, equilibrio. En este momento es más útil y necesario que nunca acercar esta valiosa herramienta, de forma sencilla y práctica, de modo que se pueda mejorar la calidad de vida de la mayor cantidad de personas posible.
La respiración consciente:
Es la base para construir cualquier práctica de yoga. Una respiración consciente y profunda es esencial para el buen funcionamiento de los órganos, las glándulas, los tejidos, los sistemas (especialmente el nervioso) y el cerebro. Nuestra salud física y mental, nuestra fuerza, la resistencia frente al cansancio, la inmunidad contra las enfermedades, la depresión y la tensión están condicionadas por cómo respiramos.
Los bebés poseen una respiración profunda, inhalan y exhalan por la nariz, dirigiendo el aire al abdomen, se nace con el conocimiento perfecto de como respirar correctamente. Sin embargo, a medida que ese bebé crece olvida esto, el adulto promedio no utiliza toda su capacidad pulmonar, teniendo una respiración insuficiente y una técnica incorrecta.
Es necesario volver a recordar ese conocimiento que se tiene de infante, recuperar la respiración consciente. Los pasos para hacerlo son realmente sencillos:
- Toma asiento con la espalda recta o recuéstate.
- Cierra los ojos.
- Inhala y exhala por la nariz, tratando de dirigir el aire al abdomen. Observa como al inhalar tu abdomen se abulta, el ombligo va hacia afuera, y al exhalar vuelve a su estado normal.
- Práctica 5 minutos al día, sin importar el horario, trata de hacerlo parte de tu rutina.
Asanas:
Una vez que se consigue normalizar la respiración consciente se puede pasar al siguiente paso de la práctica de yoga, las asanas o posturas. Para esto será siempre recomendable la guía de un maestro calificado, dada la situación sanitaria mundial muchos maestros de yoga ofrecen sus conocimientos de forma online, haciéndolo sumamente accesible.
La práctica regular de asanas mejorará la salud de cuerpo físico, dándole fuerza, resistencia y flexibilidad. Es sumamente importante que estos ejercicios se realicen utilizando la respiración consciente, de otro modo se perderán gran parte de sus beneficios.
Meditación:
Al final de una práctica de asanas es recomendable tomar unos minutos para meditar. No se necesita seguir largas meditaciones guiadas, solamente cerrar los ojos y respirar, tal y como se describe anteriormente, concentrando la atención en todas la respiración y las sensaciones del cuerpo físico. Si vienen pensamientos a la mente no hay que alarmarse, es totalmente normal, contempla la mente y deja que fluya, sin luchar contra ella.
La constancia y la disciplina en la práctica de yoga serán fundamentales para ver los cambios y los beneficios, es necesario ir paso a paso, respetar los límites del cuerpo, y recordar que yoga es para todos, cada quien avanza a su ritmo.
Lorena Silvina Díaz Silvera
Maestra de Yoga, Terapeuta holística.
Maestra de Reiki.
Maestra de Yoga en escuela “Yoga Surya”.
Maestra de Yoga en “Curso instructorado en yoga y chakras”.
Creadora de contenido para el equipo “Hoy meditación”
Creadora del curso online “Curso Introductorio a la meditación y el yoga”.
Página web: Meditación hoy